Escrito el: 15 de Setiembre de 2006 a las 09:25

"No, no estoy bien. Nunca podré ser feliz del todo, siempe tendré que llevar esta carga a mis espaldas, durante toda mi vida. Soy incapaz de gestionar mi vida por mí mismo, y necesito que me ayuden.

Además, sé que siempre estaré vigilado, y eso me ahoga, me cuesta mucho dar explicaciones de cada uno de mis pasos, no me siento capaz de desviarme de mi ruta habitual, porque parece que estoy haciendo un crimen. Si lo hago, tengo que llamar por teléfono para avisar.

Sólo hace 4 meses que estoy acorralado por voluntad propia, me estoy acostumbrando a esta nueva vida, y sí, me cuesta, pero lo estoy haciendo, lo único que te puedo decir, es que no juego, y ese era el objetivo, intento tener buena cara, sentirme feliz por esta nueva vida, pero en el fondo estoy dolido, triste...

No te preocupes, no es culpa tuya, no te culpo por la vigilancia, la considero como ayuda, eres mi bastón, mis medicamentos, pero si de verdad quieres saber si soy feliz, pues NO. Pero más infeliz soy cuando juego, y como eso lo tengo muy claro, voy a seguir haciendo las cosas bien, y quizás un dia..... esté tan acostumbrado a vivir así, que no vea este tipo de vida como un castigo, sino como algo normal y consiga ser feliz del todo.

La sensación de pérdida de libertad, la sensación de obligación, la sensación de pérdida de autoridad, la sensación de pérdida de personalidad, junto con la autoestima por los suelos, no es la mejor combinación para sentirse eufórico, déjame que me acostumbre.

Ir a la asociación, todos los lunes, tampoco me apetece, no te estoy diciendo que no quiera ir, voy a ir y lo tengo claro, pero si me preguntas si voy contento, pues no, preferiría no tener que ir. Como eso no puede ser, pues me conformo y voy.

No estoy haciendo estoy porque sea la mayor de mis ilusiones, lo estoy haciendo porque de otro modo mi vida se va a la mierda, y me he dado cuenta que es la única solución, LA ÚNICA.

Me está costando mucho, pero lo hago, y no sé porqué no juego, seguramente sea porque no tengo dinero, y un poquito de decisión por mi parte, la poquita que la ludopatía me deja."

Estas son las palabras de mi marido, después de 2 intentos por dejar de jugar, y toda una vida de tragaperras, desde los 19 años, cuando ahora lleva 4 meses y medio sin jugar y lo está haciendo mejor que nunca.

Escrito el: 15 de Setiembre de 2006 a las 09:34

Hola Carlos!

Para empezar tienes que pensar en que lo que sufres es una enfermedad, te sentirías triste igualmente si te dijesen que tienes un deficiencia coronaria y que debes estar pendiente de ella el resto de tu vida. Con el tiempo se te hará tan cotidiano el saber y asumir que esa enfermedad es la que te ha "tocado en suerte", que todo entrará en una dinámica de normalidad.

Lo que sí me preocupa es saber si tú quieres "aprender esos conocimientos de tantos años en los que otros hacían los deberes por ti", eso es lo más importante, hagas lo que hagas lo tienes que hacer por tí mismo, si lo haces por tu esposa no funcionará....

Yo soy exmujer de un ludopáta, y él siempre lo intentó por no perderme, pero no lo consigió......

Un beso Carlos, piensa en tí, debes ser tú el que siempre te apoye, son los únicos pilares que nadie te derrumba, los que dependen exclusivamente de tí, y piensa que sólo es cuestión de plantearte las siguientes 24 horas, anímo.

Escrito el: 15 de Setiembre de 2006 a las 10:08

Hola Carlos, no le des mas vueltas al asunto, solo te tienes que mentalizar en que no vas a jugar mas, por que no te va bien, que el juego es tu enfermedad y la pastilla que hay para ella es solo decir la palabra NO solo es eso el decir que NO a que es facil esa palabra, pues mentalizate y si consigues decir siempre NO a jugar, todo te ira mejor, como bien dice Gloria si tubieses otra enfermedad, que arias?

Yo saves que tengo otras enfermedades y que hago me meto en la cama y no salgo de ella o sigo luchando para tener una calidad de vida un poco mejor.

Piensalo Carlos y no te agobies.

Un abrazo

Escrito el: 15 de Setiembre de 2006 a las 10:36

lo primero felicitarte por esas tres semanas, carlos, y despues decirte que intentes llevarlo con mas calma y que empieces a valorarte, esas tres semanas las has conseguido tu, el paso de contarselo a tu esposa lo as dado tu, y eso ahy que valorartelo. y el primero en hacerlo deves de ser tu. alegrate por lo conseguido nadie lo ha hecho por ti. tu solo te hechas por tierra lo conseguido y eso no te ayuda. dale el merito que merece a tres semanas sin juego al valor de atreverte a contar tus cosas y aunque te parecca poco lo conseguido no lo es, es mucho. si no acuerdate de el miedo que tenias de contarselo a tu mujer. los ludopatas tenemos la autoestima por los suelos, y el segundo pasa para dejar de jugar y sentirse bien con uno mismo es suvir esa autoestima. el primer paso lo estas dando  y es no jugar, ahora sigue en la terapia, participa de ella, habla todo lo que puedas, valorate lo que haces y veras como poco a poco te sientes mejor. no te menosprecies carlos, tu si has conseguido cosas y las estas consiguiendo,lo que ocurre es que te cuesta creertelo. animo y adelante.

Escrito el: 15 de Setiembre de 2006 a las 12:57

Yo creo Carlos que lo mas importante al principio ES NO JUGAR... NO JUGAR... y NO JUGAR... Una vez que lleves un tiempo, ya le encontraras la felicidad al asunto. Te sentirás genial contigo mismo. Cuando dejes de tener deudas, cuando empieces a tener ahorros, cuando veas que la felicidad fluye en los tuyos porque no juegas, cuando dejes de comerte la cabeza por las máquinas como antes, cuando estés mas comunicativo porque no estés triste por haber perdido cantidades importantes, cuando no estés de mal humor por todo, cuando tengas tiempo para tu familia, cuando tus manos huelan a HENO DE PRAVIA en vez de estar verdosas y con olor a monedas...

Ya lo veras, yo despues de 8 meses sí que le encuentro la felicidad al asunto. En superarme cada día, y pasar 24 horas más sin jugar, y todo lo que ello conlleva. ANIMO.

Escrito el: 15 de Setiembre de 2006 a las 20:42

Hola Carlos no estes triste sino feliz, es mejor que tu mujer lleve las riendas de tu vida que no el maldito juego.