Siempre me ha llamado la atencion esa obsesion que tenemos los jugadores compulsivos por llegar a controlar nuestra forma de jugar y nos desespera no ser capaces de conseguirlo por vemos a nuestro alrededor que un gran numero de personas juega con normalidad y no les supone problema alguno.

Pero claro, no todos tenemos ni las mismas capacidades ni las mismas incapacidades y es en ese punto en el que normalmente me centro cuando me entra deseo, no se si de jugar por jugar, o de probar una vez mas que soy capaz de hacerlo controladamente (no se distinguir ambos casos).

A menudo, para concienciarme, pienso en que aparte de jugar controladamente, hay otras cosas que me gustaria llegar a hacer que tambien estan al alcance de otras personas, como escalar una montaña, cosa que yo no puedo hacer porque tengo vertigo o pilotar un F1 a 350 km por hora porque me da miedo.

Aceptar nuestra incapacidad para hacer algo que otras personas si que pueden es empezar a aceptarnos como somos, con nuestras carencias, debilidades e incluso, como has dicho tu, minusvalias.

Nuestro problema es muy grave, pero es bueno ver alrededor como la gente lucha contra impedimentos fisicos y mentales, reconociendo estos y adaptando su vida de forma que dichos impedimentos no les impidan vivirla con felicidad.

Porque es posible normalizar esta enfermedad, lo vemos en el ejemplo que nos dan personas que lo han conseguido.

Un abrazo a tod@s y felices 24 horas sin juego