Escrito el: 18 de Diciembre de 2009 a las 18:46

Mi padre con este problema ha sido bastante huevón, de hecho, realmente han tomado medidas porque un día que fui a verles y mi madre no estaba y se echó a llorar diciendo que mi madre le había engañado, que le había hecho hipotecar la casa para saldar unas deudas y él a cambio le había pedido que le llevara las cuentas cada mes y ella no le llevaba nada. Ahí se me fue la pinza y presioné para que hicieran un seguimiento.

Escrito el: 22 de Abril de 2010 a las 18:42

Hola, después de tanto tiempo;

Creo que han pasado dos años desde que mi madre tocó fondo y tuvimos que ingresarla en una residencia mientras intentábamos averiguar que podíamos hacer para ayudarla. Pasó el tiempo, no encontrábamos la solución. Cayó muy enferma, estuvo 18 días sin probar bocado, nos decían que se trataba de un síndrome de astinencia y/o una "huelga" para llamar la atención y que la sacáramos de allí. Después de 18 días sin comer y devolviendo bilis, la llevaron a la UCI, allí estuvo otras dos semanas, nos dijeron los médicos que tenía una intoxicación medicamentosa que le había producido un problema renal y que posiblemente tendría que someterse a diálisis. Salió de la UCI, estuvo unas semanas ingresada en el hospital. Le dieron el alta y volvió a la residencia. Allí empezó poco a poco a integrarse con la gente y empezó a sentirse mejor. Mejoró su estado físico enormemente y con ello su estado mental. Empezamos a notar que era feliz por primera vez después de muchos años. En este momento me encantaría que hubiéseis visto el antes y el después. Es la persona que fue antes de empezar a jugar, de la que ya ni me acordaba. Tal es su estado, que le hemos planteado el que vuelva a su casa, con ciertas condicciones, claro, no queremos correr riesgos. Ella misma ha decidido quedarse, no en esa residencia, sino en otra que ha elegido por sí misma. Pero lo importante es que SE HA RECUPERADO!!. Sin terapias, ni psiquiatras ni abogados, sólo con el cariño de sus hijos (excepto una que se había retirado y se está perdiendo esta satisfacción), de sus dos hermanas y de toda la gente de la residencia. Se ha volcado en ayudar a los que están peor y vuelve a ser feliz.

Quiero daros este mensaje de esperanza, sobre todo a Bertita que comprendo perfectamente lo que está pasando.

Gacias por haberme escuchado en uno de los peores momentos de mi vida.

Supal

Escrito el: 23 de Abril de 2010 a las 15:43

he leido toda tu historia y contrasta mucho con mi manera de pensar o de tratar la ludopatia.

pero quizas entienda mas de ludopatia que de cariño ( todavia trabajo en eso ) y la verdad es que si todo ese cariño a sacado a tu madre adelante, solo me queda daros la enhorabuena y felicitaros por ello.

de todos modos seguire siempre recomendando las cosas que a mi me sirven para no tener que jugar y poder seguir llevando la vida que llevo. que tambien tengo que decirlo; me encanta.

Escrito el: 23 de Abril de 2010 a las 22:01

Ahora hablamos desde la euforia, pero han sido muchos años de desastre, sentimientos contradictorios y desesperación. En realidad lo que ha servido es el que ella tocara un fondo, en el que precisamente por un cariño mal entendido no la dejábamos caer. Afortunadamente al final lo tocó y una vez allí, hay que querer mucho a alguien en esa situación para no mandarlo a la mierda, cuando eso es lo que realmente te pide el cuerpo. Ahora estamos contentos, pero es bueno visitar estos foros para recordar que no debemos bajar la guardia.

Sé que mi madre no está curada, pero al menos se está dejando llevar, cosa que hace un par de años era impensable. Claro, que si hubiera seguido así, probablemente todos hubiéramos hecho lo mismo que mi hermana "la desertora" y como ella tampoco es tonta, se lo temía y por eso también ha ido cediendo. Por tanto, estoy de acuerdo contigo en que el cariño no es suficiente, pero sí importante. Hay que tener toneladas de eso para aguantar a alguien a quien no le importa nada llevarse lo que sea por delante, siempre que pueda jugar. Me ha costado mucho tiempo comprenderlo, he tenido que leer muchos testimonios vuestros en estos foros y visitar a psiquiatras, psicólogos, sociedades de ludopatía, etc. para no desistir y poder aguantarla aún siendo mi madre. Pero ahora me alegro de haber estado ahí y quiero pensar que la hemos recuperado. Por supuesto, después de treintaitantos años, no vamos a caer en el simplismo de creer que la fuerza del cariño lo puede todo. Hay detrás mucho, mucho, mucho dolor. Sabemos que esto no ha terminado...Pero al menos tenemos un respiro.